Entre los gritos de ¡Viva la cumpleañera! y ¡Que baile, que baile! estos pelados disfrutaban de los últimos hits del merengue y el renguentón, la fiesta era un hit! Una biela va, una biela pasa, todos contentos, todos bailando, farrón!
Después de una ronda de salsas añejas (hasta la de "caballo, caballito, caballo real!") y un A dormir juntitos.. Llegó inesperadamente un pana que no estaba entre la lista de invitados y al que no esperamos en absoluto que asome a nuestra fiestita entre panas.. EL SR. INTENDENTE DE POLICÍA!!! Le arrebató el micrófono al DJ y con su clásico acento norteño nos dijo (casi literal) "Bueno señores, van a tener que ir saliendo, porque el local queda CLAUSURADO", nadie le paró bola, ya que todos pensamos que era una payasada de la cumpleañera, pero a la segunda "Señores, les estoy diciendo van a tener que ir saliendo, del local que vamos a proceder a clausurarle"
Eran apenas la 1:10 am. y la fiesta se había terminado. Sentados todos en la veredita y ya disponiéndonos a regresar a la casa.. Lo peor es que estaba con amarilla en mi hogar, el permiso terminaba temprano, pero la rumba terminó más temprano.
Por qué nos ocurrió a nosotros?? Pues sí, talvez fue un castigo divino por el reggaeton o por nuestros amigos salados, ojos secos, patas amarillas.
Para salir a farrear la siguiente vez, primerito a pedir los papeles del antro..
Después de una ronda de salsas añejas (hasta la de "caballo, caballito, caballo real!") y un A dormir juntitos.. Llegó inesperadamente un pana que no estaba entre la lista de invitados y al que no esperamos en absoluto que asome a nuestra fiestita entre panas.. EL SR. INTENDENTE DE POLICÍA!!! Le arrebató el micrófono al DJ y con su clásico acento norteño nos dijo (casi literal) "Bueno señores, van a tener que ir saliendo, porque el local queda CLAUSURADO", nadie le paró bola, ya que todos pensamos que era una payasada de la cumpleañera, pero a la segunda "Señores, les estoy diciendo van a tener que ir saliendo, del local que vamos a proceder a clausurarle"
Eran apenas la 1:10 am. y la fiesta se había terminado. Sentados todos en la veredita y ya disponiéndonos a regresar a la casa.. Lo peor es que estaba con amarilla en mi hogar, el permiso terminaba temprano, pero la rumba terminó más temprano.
Por qué nos ocurrió a nosotros?? Pues sí, talvez fue un castigo divino por el reggaeton o por nuestros amigos salados, ojos secos, patas amarillas.
Para salir a farrear la siguiente vez, primerito a pedir los papeles del antro..
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